Tardé cerca de treinta años en conseguir un mecánico para mi auto que no me arreglara una falla y me rompiera otra cosa para seguir cobrando. Todavía sigo buscando un gasista que no me pida coimas a cambio de no dejarme un mes sin gas por que tiene amigos en la empresa de servicio que si no le das unos mangos no dudan en cerrar la llave. Luego de veinte años encontré un pintor que no te pide adelantos antes de trabajar ni te deja la escalera veinte días en casa esperando que se digne comenzar la obra. Por suerte encontré un muy buen service de electrodomésticos, ahí zafé. Ya no atiendo las ofertas telefónicas por que cada vez que pacté algo la operadora me metió en algún lío y después no la volvés a enganchar. Así que no me sorprende haber cambiado tantos presidentes y formas de gobierno sin ningún éxito. Muchos inoperantes de facto y otros tantos democráticos. Pocas opciones para votar a conciencia. Si Tinelli se postulara seguramente ganaría, por que este país no vota proyectos, (los políticos ya ni los presentan) busca líderes carismáticos con cierto éxito que les digan que hacer. Un gobierno paternalista mágico como los del pasado, no debatir, obedecer la verticalidad de las ordenes de cualquier intolerante que llegue con los aliados correctos a sentarse en el sillón de Rivadavia. Si todo marcha bien hasta le votamos a la esposa para continuar el despropósito. Entonces nos hacemos la señal de la cruz, aunque no seamos católicos y cerramos los ojos esperando que ocurra lo mejor, aunque nunca pase. Somos así de democráticos. O de ignorantes, no sé. Yo por mi parte sigo buscando. Ya estoy acostumbrado.
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