Sepelios de astronautas en el espacio

Siempre quedan asuntos sin respuesta aparente en lo referente a los astronautas y sus naves espaciales. Que cómo hacen para ir al baño, que si se bañan, si tienen sexo o cualquiera sea su escatológica duda, la que parezca respondida puede que no lo sea en lo absoluto. Qué hacemos si se nos muere un astronauta en el espacio ? A pesar de que a primera vista no parece una gran cosa, el asunto tiene sus complejidades. En primer lugar, todavía es una situación totalmente hipotética porque ni la NASA, ni los chinos, ni los rusos, han perdido un astronauta en el espacio y para el caso, sería bueno saber qué es lo que tienen planificado.
Si, tiene razón, han muerto muchos astronautas, pero el que más cercano estuvo a morir en el espacio fue el cosmonauta Vladimir Komarov, quien hizo una entrada muy dura a la atmósfera y se cocinó en el intento.
Es que la mayoría de los accidentes ocurren dentro de la implacable capa atmósférica en lugar de en el espacio, especialmente durante el lanzamiento o el aterrizaje.

Ahora que si nos preparamos para el caso potencial de un astronauta muerto en el espacio, aparecerían varios problemas para la tripulación. Éstos son algunos de ellos:

1. No lo pueden guardar encerrado en un armario ya que los riesgos físicos y mentales serían enormes.

2. Un cementerio espacial pre-construido costaría millones de dólares y no es algo que esté en los planes de la NASA en absoluto. Un tipo muerto es un tipo muerto y, probablemente, la mayor parte de su cuerpo se descompondría antes de que la próxima nave tripulada llegue a la Estación Espacial Internacional.

3. Teóricamente se podría expulsar el cuerpo directamente al espacio al igual que hicieron con Spock en una antigua Star Trek y cientos de otras obras de ciencia ficción, pero eso no es lo que cabe esperar de modernos compañeros astronautas, aunque en el pasado haya sido de práctica entre los marinos sometidos a condiciones de aislamiento similares en otro tipo de "naves". Incluso si fueran lo suficientemente insensibles como para llevar esto adelante, no lo podrían realizar pues las leyes espaciales internacionales dictan que los desechos no puede ser arrojados al espacio mientras la nave se encuentre en órbita, ya que podría potencialmente bloquear, interferir o colisionar con otros objetos que yacen en órbitas similares. Claro que se podría experimentar con mecanismos que pudieran arrojar los cadáveres en una trayectoria de reentrada que asegurara la desintegración del cuerpo por la fricción con la atmósfera.

Así que cuando se trata del espacio todo requiere de un truco nuevo.
El mejor procedimiento que se ha presentado en los últimos años se llama proceso “Body Back” que asocia a la NASA con Promessa, una empresa de entierros ecológicos. Lo que se hace con este método es comprimir el cuerpo en una bolsa que se deja congelar por completo en el espacio, para luego una vez congelada entre 122 y 180 grados bajo cero, hacerla vibrar hasta que se rompa en pequeños pedazos y finalmente en polvo. Es un método muy rentable pero aún parece bastante duro de corazón.

Con la misión a Marte incluida en los proyectos futuros, alejados ya de las órbitas terrestres y sus leyes, podríamos volver a los métodos que los marineros utilizaron por tanto tiempo. De todas formas resulta esencial llegar a mejores planes de entierro considerando la mera duración de las misiones, que podrían incluir sin duda, alguna muerte inevitable, incluso si el astronauta sabe sembrar y cosechar unas deliciosas papas.

Taluego

Fuente:  http://wonderfulengineering.com/