Como dice Wikipedia pero documentan mejor los historiadores modernos :
El Plan CONINTES (Conmoción Interna del Estado) fue un plan represivo aplicado en Argentina. Algunos autores afirman que se implementó por primera vez durante la gestión de Arturo Frondizi, en tanto Julio Godio citando un comunicado de la Secretaría de Prensa y Difusión del 16 de septiembre de 1955 y publicado al día siguiente, afirma que un decreto de ese día suscripto por Juan Domingo Perón dispuso "poner en vigor la etapa ejecución del plan Conintes". En ese decreto se designó al ministro de Ejército Franklin Lucero como comandante en jefe de la Fuerza de Represión, y le autorizó a establecer el toque de queda y a adoptar las medidas necesarias "para lograr la más rápida y eficaz represión de todo acto de alteración del orden público, violencias contra las personas o bienes públicos o privados, servicios públicos, templos o establecimientos religiosos, sabotajes, depredaciones, etc." El Plan Conintes habilitó a las Fuerzas Armadas para reprimir las huelgas y protestas obreras y poner a los activistas bajo jurisdicción de los tribunales militares, una de las finalidades del plan. Fue creado con la idea de evitar el paro de los trabajadores o el abandono de la actividad de los servicios básicos, como la electricidad, el agua y el reciente servicio de gas.
Ya no habrá sobrevivientes.
Y algunos de ellos, en manos de los nuevos manipuladores, olvidan con facilidad que esos padres apropiadores fueron los que, en definitiva, les salvaron la vida.
Cuando un Cabandié habla y se comporta como milico, no es porque sus padres desaparecidos hayan sido milicos, sino que sus padres de crianza lo fueron. Cuando Victoria Donda rechaza al Frente Para la Victoria como Drácula al ajo, es porque sus padres de crianza la educaron en la democracia y los valores que ella representa.
Cuando Matias Reggiardo Tolosa ( otro hijo de desaparecidos) le responde a Cabandié y le dice...:
Cuando le decís a Belén Mosquera (la policía maltratada por Cabandie) “porque yo soy hijo de desaparecidos” se lo decís con un tono de superioridad; es decir, en algún rincón de tu mente suponés que vos y yo somos diferentes al resto de los mortales en nuestro país, que somos una raza superior o que nuestra historia nos da derecho a tener impunidad. Lo entiendo, vos sos uno de los que se ha creído el maldito relato, ese relato mentiroso que dice que este gobierno representa la continuidad de los ideales de nuestros viejos y que están poniendo esos ideales en práctica, ese relato maldito que sirve para justificar todo porque somos la reencarnación y la continuidad de la “Juventud Maravillosa”. Ese relato jamás lo creí, siempre ví a este gobierno con el mismo escepticismo que a todos los demás del 83 a la fecha, más allá de los innegables avances en materia de juzgamiento a los delitos de lesa humanidad y de los esfuerzos para encontrar a nuestros hermanos.
Hay ciertas cosas de tu conducta frente a la agente de tránsito que me asustan Juan: cuando le decís “te hiciste la guapa, pero yo soy más guapo que vos”, sabés bien quiénes usaban esta especie de poronguismo permanente, quiénes andaban por la vida matoneando a todo el mundo con una soberbia inocultable, quienes se creían impunes, quienes se creían Dios. Me entristece que uses la misma forma de conducirte que esas personas. Todavía recuerdo cuando yo tenía 18 años y empezaba a manejar, como mi apropiador me enseñaba, que yo no era igual que los demás, que era superior por ser “hijo” de él; cómo debía reaccionar frente a un control policial mencionando de inmediato su apellido, como me decía “vos tenés que chapear”, “a vos nadie te toca el culo”. Es que increíblemente, en plena democracia, seguía teniendo mucha gente que lo apoyaba y muchos contactos en la Policía Federal Argentina, y claro está para él, yo era un ciudadano de primera mientras que los otros eran de segunda.
Cómo el legislador porteño, Donda, De Pedro, Pietragalla y Montenegro se valieron del pasado para buscar una banca. |
Taluego.
Mire, estoy cansado de banderas gastadas.
ResponderEliminarIncluso el peronismo es una.
Ni hablar del socialismo o algo llamado "Unión Cívica".
El tema de los niños apropiados, lamentablemente se usa en forma política. Hasta eso.
Hay tanto mentiroso y simulador dando vueltas, que al final, todo se pone complicado.
Mi abuelo, debo admitir después de tantos años, lo simplificaba todo:
Un paredón de 500 kms de largo.
Un abrazo.
Don Gaucho. Ya creo que con 500 no alcanza ;)
EliminarUn abrazo.
el padre adoptivo, ¿adopta por el bien del niño nacido o adopta por su necesidad de ser padre? Porque adoptar es el resultado de una búsqueda de paternidad en la mayoría de los casos. Sé que existen muchas situaciones en las que el niño es adoptado por su situación. Conozco más padres adoptivos por su deseo que por la necesidad del niño y la consideración de su futuro.
ResponderEliminarDoña Marga. Hace poquito escuchaba a una especialista en el tema adopción y remarcaba que la legislación considera que los padres solicitantes no tienen derechos especiales por pedir la adopción. Solo el niño tiene derechos y esos derechos se resumen en contar con una familia que lo proteja.
EliminarMe pareció muy acertado.
Cariños.