Graciela y El Justicialista

En la década del 60´ todos aprendíamos que el "Sueño Americano" solo llegaba hasta la frontera con México y nos dejaba a todos los demás con insomnio permanente. Los autos eran poco menos que un lujo y aquellos que los tenían demostraban haber entendido las nuevas necesidades comunicadas por medio de la televisión con programas tales como el Show de Dick Van Dike o cualquier otro que se ambientara en los suburbios y su tranquila , esplendorosa e irreal vida norteamericana.

A dos casas de la mía vivía una familia que había iniciado el barrio tal como nosotros lo habíamos hecho. Desde cero. Un día el acontecimiento que se regó como pólvora fue la llegada de un automóvil que no por usado dejaba de ser un bien envidiable. Las nenas hablaban del color y los varones tratábamos de averiguar de qué marca se trataba aquel modelo.

Nunca peor puesto su nombre, el auto se llamaba "Graciela" y uno permanecía en la duda de si existía o no semejante marca o modelo, o simplemente era que su dueña anterior había colocado su nombre como elemento decorativo sobre la chapa.

Sin embargo tras tan femenino apelativo se escondía el Sedan cuatro puertas creado durante el gobierno del general Perón y que tal como el partido que él comandaba se había terminado llamando "Justicialista".  Varios fueron los modelos, según parece se vendieron cuatro de ellos: Sedán, Rural, Sport y Pick Up, pero el Sedán Justicialista (el Graciela) fue el único que los gobiernos posteriores al derrocamiento de Perón permitieron que se siguiera comercializando.

Con el tiempo los repuestos fueron escaseando  (sobre todo la caja de velocidades) hasta llegar a un punto en que el auto dejó de ser una alternativa viable y pasó a engrosar las filas de los grandes logros argentinos que debieron abandonarse para beneficiar al comercio con el líder anglosajón de éste continente. Si, el mismo del Sueño Americano de allá.

La historia había comenzado mediante el decreto Nº 6191 del 30 de noviembre de 1949, firmado por el presidente de la Nación Juan Domingo Perón, que ordenaba la transformación de una fabrica de aviones de la Armada en la fábrica que se daría en llamar "Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado" (I.A.M.E.), que en realidad eran varias fábricas bajo un mismo nombre que tenían como objetivo: "la investigación, fabricación y reparación de material aeronáutico y  la promoción y producción automotríz".

Así nacía la idea de producir en serie un auto argentino, íntegramente construido en nuestras tierras: el Auto Justicialista un coche de bajo costo y para todo el pueblo. En la I.A.M.E. se producirían coches tan populares como el Justicialista y el Rastrojero, entre otros.

Sedan Justicialista

Pick Up Justicialista

Rural Justicialista

Sport Justicialista Pre-serie

La presentación oficial del Justicialista se realizó el Día del Trabajo de 1952 , pero el desarrollo de los prototipos había comenzado en el año 1949. Se les había puesto un motor de dos tiempos de 680 cm3 y 33 CV, con el que alcanzaba una velocidad máxima de 100 km/h. El mismo era el producto del apuro de los primeros días, cuando se había buscado una rápida inspiración en el auto DKW y en especial en su motorización de 2 cilindros. Como el tiempo les quedaba corto y ante los apremios del General  buscaron más efectividad que originalidad, disponiéndose la importación de dos DKW provenientes de Alemania, un sedán y una rural. El primer paso fue la copia fiel de todas y cada una de sus partes, cosa que no fue una tarea para nada sencilla pero era mejor que comenzar de cero.

Rápidamente se verificó en las pruebas que el motor de 2 cilindros elegido resultaría algo débil, sobre todo para el pesado sedán y se optó por un revolucionario sistema de cilindros en “u”, en un motor absolutamente diferente llamado M-800, aunque algunos indican que fue una copia de uno diseñado originalmente por Porche.

Una de las particularidades del Justicialista fue que una de sus consignas principales era que todas las piezas fueran nacionales, incluso los materiales con que estaban hechas. Por ejemplo, para la fundición del block y de la tapa de cilindros se utilizo el arrabio de Zapla, obtenido en los altos hornos de la Dirección Nacional de Fabricaciones Militares.

El "Pocho" en su Sport

Pero el "Pocho" insistía en que también quería tener un coche deportivo, así que los ingenieros debieron concebir una versión llamada Sport. Para la carrocería, no anduvieron con chiquitas tampoco. Se le encargó el trabajo a un grupo de diseñadores del área de Proyecto de Aviones, y para tal tarea se inspiraron en las formas del famoso Chevrolet 51 aunque también contaba con algún rasgo atrevido u original como lo eran las pequeñas jorobitas que estaban justo antes de los faros traseros, copiando un concepto ya incluido en el estilo de los Cadillac de la época. Este diseño fue presentado en 1954 e increíblemente para la época, tenia su carrocería reforzada con fibra de vidrio, cosa que solo el Corvette ostentaba en esos años. Otro detalle a destacar que era sin duda el capot con forma de tiburón.

 Justicialista Institec Grand Sport con techo

Justicialista Institec Grand Sport cabriolet

En cuanto a su performance, el Sport se diferenciaba bastante de su hermano menor, ya que tenia un motor de 1.500 cm3 de 72 CV, en donde alcanzaba una velocidad máxima de 190 km/h. Su debut en las pistas tuvo lugar en el Grand Prix de la República Argentina en 1954, oportunidad que sirvió para crear una competencia monomarca con 15 de estos Justicialistas.

Justicialista-deportivo

Justicialista Grand Sport V8

Además de estas dos versiones mencionadas hubo otras llamadas Institec Grand Sport, una con techo y otra cabrio, con motor V8, pero que nunca pasaron la etapa de experimental. Igual, fueron mostradas en el Salon de Turin, París y Ginebra.

Tras la caída del gobierno de Perón, en 1955, el proyecto fue abandonado y esto desembarco en la desaparición paulatina del Justicialista. Los repuestos (en especial la caja de transmisión) comenzaron a faltar y el escaso apoyo político termino por darle el golpe de gracia al Justicialista.
En su cortas historia se fabricaron 167 unidades del Justicialista Sport y de los otros modelos, hasta 2.300 unidades de cada uno.

 El malogrado Auto Popular Argentino de los Kirchner

Claro el que mandó hacer Perón en 1953 se llamó Justicialista; pero en el año 2009 Néstor y Cristina Kirchner prefirieron despegarse de ese nombre y usar uno menos asociado al peronismo para bautizar su proyecto de auto argentino. Lo denominaron A!PA, Auto Popular Argentino porque por entonces no existía el concepto "Auto Para Todos"
La Compañía Argentina de Automóviles presentó por entonces imágenes del proyecto, un crossover con apariencia de todoterreno pero sin ser 4x4, de 4 metros de largo, 1,90 mt de ancho y 1,70 de alto. Prometieron como muchas otras cosas, tener el primer prototipo funcionando el primer trimestre de 2010 (y seguimos esperando). Su valor se estimaba entre los 25 mil y los 30 mil pesos argentinos, esto es unos US$6.500 de entonces. 

 Un muy bonito concepto: el A!PA

El modelo del vehículo mostrado en estos dibujos tendría espacio para cinco pasajeros, pero se proyectó con una tercer fila de asientos. En cuanto a la mecánica, se previó que el A!PA usaría un motor de cuatro cilindros, de 999 centímetros cúbicos de cilindrada y 65 caballos de potencia. La idea era que rindiera  26 kilómetros por litro de combustible y pudiera funcionar también con alcohol.

Otro sueño argentino, que a diferencia de los de Perón y Evita, sólo se queda en promesas vanas.

Taluego.

Fuentes consultadas:

http://cochesmiticos.com
http://www.coches20.com
http://industriamilitarargentina.blogspot.com