Necesitamos modelos aventureros. Nos hacen soñar despiertos.
Este señor noruego sin ninguna experiencia en el mar, salvo haber vivido durante su infancia en la Polinesia, decidió una vez finalizada la guerra, en donde estuvo involucrado como voluntario, comprobar una teoría que sostenía desde temprana edad.
Ya cuando vivía en la Polinesia había comprobado que muchas especies de flora y fauna allí existentes coincidían con las mismas encontradas en Sudamérica. De allí transliteró la idea que los humanos también podían haber seguido el mismo camino y no como se creía comúnmente que hubieran llegado desde Asia.
Heyerdahl decidió emprender una expedición que repitiendo las rutas que él suponía habían seguido los Incas, demostraría la veracidad de su propuesta. La llamó expedición Kon-Tiki al igual que a la nave en donde se embarcaría para cruzar el Océano Pacífico hasta la Polinesia en el año 1947.
El nombre de la embarcación se debía al dios solar de los Incas, Viracocha, de quien se decía que antiguamente había llevado el nombre de "Kon-Tiki".
Se construyó con estos 9 troncos de balsa, cada uno de ellos de 13,7 metros (m) de largo y 60 centímetros (cm) de diámetro, los cuales estaban unidos entre sí con la ayuda de lazos de cáñamo. Transversalmente a los troncos principales se ubicaron troncos de balsa de 5,5 m de longitud y 30 cm de diámetro, a intervalos de 1 m, y con el objetivo de dar soporte lateral. Adicionalmente, se utilizaron tablones de pino en los laterales de la embarcación, así como secciones de 60 cm de largo y 2,5 cm de espesor del mismo material como quillas.
La travesía comenzó el 28 de abril de 1947. Heyerdahl y otros cinco integrantes viajaron durante 101 días a lo largo de casi 7.000 km por el Océano Pacífico, hasta llegar a un arrecife en el atolón de Raroia, en las islas Tuamotu, el 7 de agosto de 1947. La embarcación resultó totalmente destruida en la barrera de coral de la isla, pero toda la tripulación llegó a tierra sana y salva.
Trate de imaginarse usted mismo viviendo esta aventura a merced de las fuerzas de la naturaleza y encomendando su vida a la resistencia de nueve troncos atados con hierbas y dígame que tan audaz se debe ser para lograrlo.
La tripulación estaba compuesta por:
- Thor Heyerdahl (1914–2002) que era el líder de la expedición.
- Erik Hesselberg (1914–1972) era el experto en temas de navegación, y además artista. Fue el responsable de pintar la figura de Kon-Tiki en la vela de la embarcación.
- Bengt Danielsson (1921–1997) fue el encargado de las provisiones y el racionamiento de los alimentos. Danielsson era un sociólogo que se había interesado en teorías de migración humana. Por otra parte, cumplió el rol de traductor, ya que era el único miembro de la tripulación que sabía hablar español.
- Knut Haugland (1917–2009) era un experto en radio, que había sido condecorado por los británicos en la Segunda Guerra Mundial debido a su desempeño en la Batalla del agua pesada, que frustró los planes de Alemania de desarrollar la bomba atómica.
- Torstein Raaby (1920–1964) también estaba a cargo de la transmisiones por radio. Había ganado experiencia como operador de radio mientras estuvo infiltrado en la Segunda guerra Mundial detrás de las líneas alemanas, espiando el acorazado Tirpitz. Sus transmisiones secretas por radio a la larga ayudaron a los aliados a localizar y hundir el buque.
- Herman Watzinger (1910–1986) era un ingeniero especializado en las mediciones técnicas. Durante la travesía, estuvo encargado de registrar las observaciones meteorológicas e hidrográficas.
Aquí puede verla en su totalidad.
Heyerdahl no se durmió en sus laureles y en la década del 70 emprendió una expedición similar pero que demostraría la población de la américa central por los egipcios. Para esta expedición realizó una embarcación de papiro que debía seguir las corrientes atlánticas para desembarcar en Barbados. Esto indicaría una conexión entre las tribus amerindias y las del antiguo Egipto. La embarcación de papiro, bautizada como RA por el dios del Sol, navegó 2700 millas en 56 días hasta que las tormentas y los defectos de construcción obligaron a la tripulación a abandonar su objetivo a solamente una semana de Barbados. Sin embargo Heyendahl insistió diez meses más tarde, e intentó el mismo viaje con una embarcación más pequeña, la RA II, de 12 metros. Esta embarcación cruzó la parte más ancha del Atlántico (3270 millas) en 57 días, de Safi a Barbados.
En el año 1978 realizó la expedición Tigris, partiendo de Irak y usando las rutas tradicionales que los sumerios usaran 5000 años atrás para demostrar que podría haber habido contacto e influencias entre las grandes culturas de Mesopotamia, del valle de Indus y de Egipto a través del mar. Los mismos indios que construyeron el RA II ayudaron también en el armado de este barco. Esta vez fue construido en Irak, usando las cañas locales. Con unos 17 metros de largo y un equipo de 11 personas, el Tigris fue la embarcación de caña más grande que Thor Heyerdahl haya construido. La expedición se dirigió río abajo por el Tigris a través del golfo pérsico y se adentró en el océano Índico. Después de 5 meses, el viaje acabó repentinamente a la entrada del mar Rojo. Debido a las guerras que había en la zona, al Tigris se le prohibió partir del puerto de Djibouti. En señal de protesta contra las guerras, Heyerdahl decidió prender fuego al Tigris.
Thor Heyerdahl ha recibido numerosas medallas, premios y galardones. En 1999 recibió el premio noruego Peer Gynt. Ha sido un miembro regular de varios congresos científicos, entre los que destacan el Congreso Internacional de Americanos, el Congreso Científico del Pacífico y el Congreso Internacional de Antropología y Etnología.
Su meta siempre fue demostrar que los océanos no fueron barreras para las antiguas civilizaciones, sino que por el contrario, fueron un medio de unión entre las mismas.
De la expedición original sólo lo sobrevivió Knut Haugland, luego de él para mí, lamentablemente, se terminaron los aventureros.
Lamento muchísimo la triste imitación del desafío original, pero más aún la falta de ética demostrada por estos compatriotas que jamás reconocieron lo errado de su obrar ni mencionaron a Thor en ningún momento.
La ruta fue similar al RA II y el medio, una copia de la Kon-Tiki.
Taluego.
Sì, Thor viejo y peludo, nomàs.
ResponderEliminarCon las "RA", querìa probar la torìa heliocèntrica. Que tipos, èsos.
Tenìan un poco màs de huevos que los que los imitaron, no?
Saludos
Don Gaucho: La Kon-Tiki tenía que ver con Viracocha,el dios Sol Inca, así que también estaba probando la misma teoría. Por suerte después pasó a otros nombres.
ResponderEliminarLos argentinos copiaron tanto que hasta le pusieron un sol a la vela de la balsita. Que jodidos.
Che, blogger debe andar mal. Dice que publicaste "agradecimiento", pero no lo encuentro.
ResponderEliminarEsto es una confabulaciòn!!
Don Gaucho: Se cambió a "Arrepentimiento" porque lo borré yo.
ResponderEliminarVoy a ver si en el futuro lo armo bien.
Blogger anda bien, yo soy el que anda falto de contenido.
Un abrazo
Exelente Reseña, es parte de mi vila lectora infantil, podras recolocar los links que no estan activos, Saludos desde Lima
ResponderEliminarDon noel. ya figura una nueva entrega. Gracias por el aviso
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