Mire, no termino de leer la última de Harold Fragapane , personaje creado por mi amigo el Gaucho Santillán, que paseando por la red en busca de buenos títulos para blogs me encuentro con una historia digna de este Dr. tan famoso.
Siiii, OPin vuelve a las andadas y quiere desprestigiar a uno de los inventores más taimados que ha dado la historia. Muchos le adjudican a Thomas A. Edison la invención de la cinematografía en desmedro de los hermanos Lumiere, pero como la mayoría de los inventores lo que hizo fue juntar algunas ideas preexistentes.
Si usted tiene el reloj y además le han dejado la campana, seguramente podrá inventar el despertador.
Parece ser que la retroinvención fue realmente un invento de Edison pues un buen día luego de haber visitado a Eadweard Muybridge se fue corriendo a la oficina de patentes a registrar un aparatito que llamó “Quinetoscopio” (del griego Kine = movimiento y Scopio = visión). Muybridge le había comentado algunas ideas para potenciar su invento, el Zoopraxiscopio incorporándole incluso el sonido que venía de la mano del fonógrafo.
Si bien el invento de Muybridge era algo rudimentario, hacía uso justamente de la deficiencia que, según antiguas teorías, presentaba el ojo humano al cambio repentino de las imágenes, pues si se las cambia en orden y rápidamente, la permanencia de las mismas en la retina las hace ver en un movimiento aparente. Hoy en día se sabe que esto obedece a un comportamiento particular del cerebro, más exactamente en el Núcleo Geniculado Lateral en una parte llamada sistema magno celular. Esa ilusión óptica es la que permite la existencia de la televisión, el alumbrado a 50Hz y que el juguete que muestra Jonny Deep en el Jinete sin Cabeza se haya convertido en el más popular del siglo XIX.
Luego de patentar la idea de su “amigo” Muybridge, Edison le encargó a su empleado William Kennedy Laurie Dickson que se lo desarrollara ya que él estaba muy cansado de tanto pensar.
Entregado el producto final, se lo llamó en EEUU “Kinetoscope” y batió todos lo records de taquilla. Nuestro amigo Willy renunció mucho más tarde y fundó una de las compañías de cine mas exitosas, para luego de puro aburrido, retornar a la labor ingenieril hasta su muerte en 1935.
Ahora bien, aún el tema era que el espectáculo duraba muy poco tiempo porque el mecanismo de cilindros usado era una limitante de consideración. Así que Edison fue a visitar a otro “amigo” Etienne-Jules Marey un médico y fotógrafo que había diseñado el “cronofotógrafo" y que también había elaborado una tira de película de papel larga donde imprimir las secuencias y así aumentar la duración del show.
El siguiente invento fue el quinetógrafo realizado para imprimir una película de celuloide traslúcido inventada por John Carbutt e incorporada en el laboratorio de Edison por William Heise y nuestro otro “Willy” el amigo Dickson. Una vez imprimada y revelada, la misma se colocaba de manera tal que serpenteara por una serie de ejes dentro de una caja de madera en la cual se miraba por un visor alojado en su parte superior.
En todos los casos estaba involucrado William Kennedy Laurie Dickson, incluso en el primer intento de película sonora, realizado por él mismo sincronizando mediante una correa un quinetoscopio con un gramófono, que era en definitiva lo que Eadweard Muybridge le había comentado en estricto secreto a su "amigo" Edison al principio de esta historia.
En 1897, Edison comenzará la llamada «guerra de patentes» con los hermanos Lumière respecto al invento de la primer máquina de cine. Por suerte, hasta el día de hoy son reconocidos los hermanos Lumiere y no Edison, como los verdaderos padres de la cinematografía.
Bueno, no sé si le habrá quedado claro. Por las dudas le digo que en este blog dudamos de todos lo inventores declarados y hasta el momento estamos en lo cierto.
Taluego.
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