Durante décadas las familias retratadas en la televisión han servido de modelo a seguir a cuanta coleccionista de Barbies y jugador de Play Station anda por allí. El "estilo de vida del sueño americano" se había exportado mediante todos los métodos de difusión posibles y las niñas terminaron entendiendo que tener una familia feliz consistía en ser un desastre en la cocina para justificar el pedido de delivery, mientras los varoncitos creían que ser un GiJoe o un genio de la estafa económica cumplía con las expectativas que se tendrían de él. Aún se pueden observar familias que imitan aquello que ven en las revistas de moda o actualidad y conduciendo sus vidas en base a las recetas de psicólogos que nunca recuperaron un paciente pero cobran sueldos exorbitantes.
Luego de las crisis económicas que ha sufrido el primer mundo comenzaron a aparecer nuevas sit-com que en realidad demuelen todos los estereotipos que tanto tiempo le ha costado construir al gran país del norte. Los héroes ya no son glamorosos ni el promedio es tan exitosos como se piensa. La falta de cobertura social, sueldos insuficientes e inestabilidad laboral hace que el público promedio se identifique con los anteriormente denominados antihéroes que ahora son motivo de curiosa admiración.
De repente aparecieron los Sainetes versión Gran País del Norte, emulando la ya histórica muestra teatral argentina que hace uso del estereotipo de la exageración para sacarnos alguna sonrisa. En la Argentina, el sainete original combinado con las artes del circo, dio como resultado una modalidad original conocida como “sainete criollo”, que se caracterizó por reflejar las costumbres de la vida en los conventillos, agregando a los consabidos elementos humorísticos un conflicto sentimental y otro trágico.
Esas variantes aparecen en la televisión como una versión moderna que intenta retratar a las clases bajas norteamericanas con un poco de humor al mejor estilo Simpson y los dibujos animados para adultos que se fueron desprendiendo de esta veta original de Matt Groening..
Tarde, debo confesarlo, descubrí la serie The Middle nombrada en Latinoamérica como
"Una Familia Modelo" y en México
"Una Loca Familia" emitida por de la cadena ABC. La serie es vieja ya que comenzó su derrotero en el 2009 y sigue con total éxito.
Tal vez en un principio sentí rechazo por los personajes exagerados a un nivel que no los hacía creíbles ni queribles, pero en cuanto uno presta atención a la historia y se identifica con los personajes y sus problemas, comienza un proceso empático irreversible. El white-trash americano toma la delantera y nos pone frente a un espejo donde lo peor de nosotros enmarca lo de mayor valor sin arruinarlo.
La trama de la serie se centra en los Heck, una familia de clase media baja que habita en los suburbios de Orson, un pueblo ficticio del estado de Indiana, justo en el medio de Estados Unidos (de ahí el nombre de la serie unida a su condición social y edad de los personajes - en el medio del país, la clase media y la mediana edad-).
Frankie la matriarca protagonista, es una mujer en sus cuarenta que intenta criar y sacar
adelante a su familia lidiando con los problemas del día a día con un
gran sentido del humor. Debe ocuparse de las tareas del hogar,
atendiendo los problemas de su neurótica hija adolescente Sue;
reclamando desesperadamente la atención y el amor de su hijo, el atleta y
popular Axel; y resolviendo las excentricidades de su hijo menor Brick
que pasa todo el día leyendo libros (o cualquier otra cosa que contenga
letras), y que además tiene serios problemas de distracción. Su mano
derecha para realizar las tareas es su esposo, Mike, empleado en una cantera, que se caracteriza por ser anticuado, tranquilo y gran fanático de los deportes. Él muy alto, ella pequeña, él tranquilo, ella dinámica, él despreocupado, ella, bueno, ya me entiende...
Nada es perfecto en esta familia; ni la casa, ni los sueldos; ni los hijos; ni los vecinos; ni el orden ; ni nada. Un "promedio" negativo que hace mucho más importantes los valores morales y de unión familiar que quedan como mensaje en cada capítulo. Casi como en la vida real.
Si tiene ganas de ver una serie que intenta divertirnos mostrándo el ángulo que los "exitosos" tratan de ocultar, seguramente The Middle será una de sus preferidas.
Se la recomiendo.
Taluego.
Estimado: El nombre de The Middle es la mitad exacta de todo?el centro exacto de la nueva América , o lo que es mejor que desee ser porque hay cosas peores...Afganistán, por ejemplo...
ResponderEliminarSeré mal pensado...?
Gracias"
Jorge
Don Jorge. Es el medio exacto de la América de ellos, la del norte, que está dividida por la mitad aunque un 6% tiene el dinero del 90% de todos. Si..hay cosas peores, como una guerra civil en Siria que se me aparece como un futuro posible en la mitad de la América del sur donde el 6% tiene el dinero que le corresponde al otro 90% y son todos enemigos ;)
EliminarUn abrazo.