Hace muy pocos días y gracias a trabajos realizados por AUSSA a pedido y por cuenta y cargo del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se restituyó al tráfico pesado el viejo Puente Pueyrredón, aquel que desde el año 1969 había quedado inutilizado en su área levadiza y que poco a poco fue perdiendo sus otras facultades, chapas y bulones que caían sin interrupción en las prístinas aguas del Riachuelo. No no les hablo del Puente Pueyrredón nuevo, ese que conecta la Av. Montes de Oca en Capital con la Av. Mitre en la provincia, no, se trata de su antecesor aquel que debió ser forzado a bajar sus hojas basculantes para que los obreros pudieran entrar en la Capital y hacerse oir. Su reclamo: que liberen a Perón. Era 1945 y luego se lo llamó Día de la Lealtad . La ubicación de este puente es como continuación de la Av. Vieytes, allí donde se une a la calle Lavadero en Capital y el nacimiento de la Av. Mitre justo donde se une a la Av.Pavón, Perón o Illía o como quieran llamarla allá en Provincia. Hoy lo han reparado y asfaltado. Han puesto nuevamente en funcionamiento el mecanismo elevador de los tramos centrales u hojas basculantes. En resumen, un puente sabiamente recuperado para la ciudadanía. ¿Sabías que el primer puente de hierro sobre el Riachuelo fue construido en el año 1867? Todos sus materiales vinieron desde Inglaterra, como ocurría con todo lo que se usaba en la construcción de los ferrocarriles. El mismísimo día que lo inauguraron una correntada sin igual lo derribó. No, no se preocupe, éste no es el mismo.
Chau.
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