martes, 28 de diciembre de 2010

Cuento - Estación terminal

Como siempre ando contra la corriente y mientras todos están brindando y la red parece camposanto yo me vengo a publicar un cuento. Si ya sé que no lo va a leer ni el autor, pero que quiere, me salió ahora y se lo mando de regalito de navidad para que lo disfrute.
El cuento no está acá, está aquí, en Cuentos sin Rumbo . Las letras son un poquitín chiquitas pero puse un sistema con A+/A- que permite que las ajusten a voluntad, pero si es medio chicato o no puede encontrar esto de lo que le hablo también  puede leerlo en este otro lugar que es un espejo al cuete pero con letra más grande o en No Somos Escritores donde por esta vez tendrán algo recién salidito del horno.
No vaya a leer otro cuento como la otra vez, ¿me entiende? Éste se llama:
Lo llevo en el autito como antes, vamos (tiene que hacer click en el autito porque si no, no arranca. No, no es una cocina, deje el encendedor electrónico en su lugar, use el mouse, haga click  con el mouse en el Amarillo para Cuentos sin Rumbo, o en el Rojito para No Somos Escritores)
Taluego

2 comentarios:

¿Sobrevivió a mi punto de vista? ¡Ahora es su turno!
Sin embargo como los comentarios son una gentileza entre usted y yo, se moderarán y anularán aquellos subidos de tono, agresivos o que utilicen lenguaje soez.
Aproveche su oportunidad , dele, que total nadie lo está mirando y acá lo tratamos mejor que en el mundo real.