lunes, 1 de septiembre de 2014

The Knick y la historia

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Encontrar una serie que logre hacerme cerrar los ojos por la impresión es algo raro. Que deba poner pausa en mi reproductor para tomar aire y poder seguir viendo ya es mucho más. Y no es que sea algo gratuito o gore, sino que en el piloto de la serie The Knick no se han escatimado litros de sangre de utilería ni primeros planos de operaciones que hoy en día ni siquiera se le realizarían a un perro.
Claro que toda esta brutalidad visual no puede ser sostenida en el tiempo sin deteriorar la fidelidad de la platea sensible o cuasi normal. Ya en su segundo capítulo se bajan las cataratas de hemoglobina, pero siempre sin dejar de lado lo descarnado o el primer plano del dolor humano que existe en la realidad que se está representando.
Claro que en lo referente a la veracidad histórica hay que ser un poco condescendiente en beneficio del espectáculo.
Ésta nueva serie de Steven Soderbergh, tiene como objetivo convertirse en un drama médico que exponga el panorama social de la Nueva York del 1900. Se desarrolla en un hospital de ficción, el Knickerbocker, y se centraliza en su nuevo cirujano en jefe, John Thackery (Clive Owen), ascendido luego del suicidio de su predecesor tras haber batido el record de procedimientos infructuosos seguidos de muerte.
Ese hospital se visualiza como un modelo del progreso de principios del siglo 20, y  a su vez  como una casa del horror. Hay tres cruentas y extremadamente crudas muertes en los primeros 10 minutos de la ficción, sin embargo, se trata (según nuestro protagonista) de una época de "posibilidades infinitas". "Más se ha aprendido sobre el tratamiento del cuerpo humano en los últimos cinco años que en los últimos quinientos." nos dice mientras se lava las manos ensangrentadas tras el último intento fallido.


Los productores del programa han hecho hincapié en su deseo de autenticidad histórica y los grandes esfuerzos adoptados para replicar los procedimientos quirúrgicos de la época con la mayor exactitud posible. Gran parte de su puesta en escena proviene de la consulta a los registros del Archivo Burns, una impresionante colección histórica de fotografías y material de la historia de la medicina clínica realizada por el Dr. Stanley Burns, un médico que también se desempeña como asesor médico para el show. 
Owen ha dicho que los escritores del programa basan al personaje de John Thackery en William Halsted , una de las figuras más importantes de la cirugía moderna y adicto al consumo de drogas. A Halsted se le acredita la realización de la primera transfusión de sangre de emergencia en los Estados Unidos , y por revolucionar la cirugía de manera tal que se la enseñe y se practique como una disciplina científica meticulosa.


En 1889 Halsted, fue profesor fundador, junto con tres colegas, del Johns Hopkins hospital, donde dirigió el departamento de cirugía. Él, al igual que el ficcional Thackery era adicto a las drogas, y experimentó con la cocaína como anestésico para las cirugías. Aún así, es poco probable que hubiera quedado impresionado con la actitud arrogante de las exposiciones en el quirófano de su contrapartida en la ficción. Él original era un hombre sombrío y solitario. "Halsted subordinada brillantez técnica y  velocidad en la disección por un más meticuloso y seguro, aunque a veces lento, procedimiento quirúrgico "


En 1900, la cirugía se había vuelto más común y aceptable de lo que en The Knick se implica. En el primer episodio Thackery, reflexionando sobre sus comienzos en el hospital, le dice a su predecesor: "Usted está legitimando la cirugía, sacándola de las peluquerías y llevándola al futuro, y quiero ser parte de ella."
En la vida real en el Nueva York del 1900, la cirugía en un hospital de alto vuelo probablemente ya habría perdido gran parte de su antigua imagen desagradable como una práctica de cruda carnicería. Entre 1880 y 1890, fueron concebidos aproximadamente 100 nuevos tipos de operaciones , todas posibles gracias a los avances en anestesia y antisepsia descubiertos en la última parte del siglo19.
Un pequeño aunque interesante anacronismo aparece por ejemplo en que en el programa se muestra a los cirujanos operando con las manos desnudas, en lugar de con guantes de goma, que Halsted y sus colegas comenzaron a utilizar a finales de 1890 .
A finales del siglo19 y principios del 20 se observó un increíble aumento en el número de hospitales en los Estados Unidos. La calidad, por supuesto, variaba mucho. Todo lo que se requería era una casa con algunas camas y fondos como para iniciar uno.
En 1910 se publicó un libro escrito por un cirujano que había pasado un tiempo ejerciendo en Nueva York en el Washington Heights. Se tituló Médicos Caos y Delito, y causó sensación al pretender documentar faltas graves en hospitales donde se emborrachaban las enfermeras de noche, había superintendentes codiciosos y cirujanos incompetentes. El dinero y el soborno representado en The Knick podría haber ocurrido incluso en los hospitales más acreditados.


Es verdad que algunos trabajadores de los hospitales pueden haber sido muy codiciosos, creando incluso, un oficio que consistía en obtener cadáveres en un espeluznante mercado negro, pero no pudo haber existido como se lo muestra en The Knick. Es cierto que los cadáveres habrían sido un producto con mucha demanda, dice Michel Anteby de Harvard Business School, y que los más frescos eran mejores para el estudio que los más descompuestos y por lo tanto mejor pagados. Así que uno podría pensar con todo derecho que un conductor de ambulancia como el mostrado en la serie, siempre estaría en la búsqueda de una oportunidad de negocios debido a su posición privilegiada para ofrecer (por una buena tarifa) pacientes desafortunados que no sobrevivieron el viaje al hospital.

 
Pero Kernahan señala que es poco probable que esto sucediera en el año 1900 en la ciudad de Nueva York: Nueva York fue uno de los primeros estados a aprobar "actas anatómicas" a mediados de siglo 19, para desalentar el robo de cuerpos y la venta inadecuada de cadáveres. Bajo esas leyes, sólo los cuerpos sin reclamar por amigos y seres queridos podrían ser utilizados para estudios médicos. A partir de la década de 1830, estos actos también contribuyeron a proporcionar a anatomistas con " un suministro constante de cadáveres libres, ... rescatar a la profesión de la mancha de asociación con desagradables ladrones de cuerpos de clase baja ", escribe Michael Sappol en "El tráfico de cadáveres: Anatomía y Identidad Social en América del siglo XIX ". Para los conductores de ambulancia en 1900, negociar en un comercio de cadáveres habría sido una manera dudosa de hacerse rico.
Para un hospital que se supone que es la vanguardia de la historia quirúrgica, el Knick es extrañamente conservador con respecto a muchas de las prácticas médicas y actitudes. Lo que es real (pero anacrónico), es que fue Nueva York la primer ciudad de EEUU donde se contrató a un médico negro para trabajar en un hospital. En la vida real , esto no sucedió sino hasta 1920, con el nombramiento de Louis Wright en el Harlem Hospital , ocasión en la que varios cirujanos del hospital renunciaron en protesta.
La serie promete entretenimiento genuino que aún lejos de la realidad histórica , nos provee de una recreación de época excelente dentro de un producto de alta calidad

Alguien se ha tomado el trabajo de subir el piloto subtitulado a Youtube . Espero lo disfruten y sigan la serie como lo haré yo.


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El artículo The Knick y la historia fue publicado por OPin el lunes, 1 de septiembre de 2014. Esperamos que le sea de alguna utilidad o interés. Gracias por su visita y no olvide dejar su comentario antes de partir. Hasta el momento hay 1comentarios: en el post The Knick y la historia

1 comentarios:

  1. Precisamente eso es lo interesnate de The Knick, además esta muy buien actuada y el argumento es muy bueno, Steven Soderbergh ha hecho un gran regreso a la televisión

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